Marcel Ciolacu, primer ministro de Rumanía, presentó su dimisión después de que el candidato de su coalición, Crin Antonescu, no lograra pasar a la segunda vuelta de las elecciones presidenciales. La contundente victoria de George Simion en la primera vuelta evidenció la pérdida de apoyo a la coalición gobernante, lo que llevó a Ciolacu a considerar que su gobierno ya no tenía legitimidad .